En San Luis, Xavier Rubilar, un empleado de la empresa Edesal, encontró un cartel de un padre que no podía pagar la boleta de luz y pedía que no le quiten el suministro. Sin pensarlo, inició una campaña solidaria para ayudar al desconocido.

“Por favor, no me corten la luz. Me quedé sin trabajo, estoy solo con mis dos hijas. En cuanto pueda, voy a pagar la luz. Por favor y gracias”, decía el papel pegado en el medidor ubicado en el exterior de su hogar. “Al ver todo eso quebré en llanto”, explicó Xavier a LA NACION.

Primero, el empleado pidió ayuda en un estado de WhatsApp. Cuando se dio cuenta de que eran muchos los que querían colaborar en la causa, tomó la iniciativa de hacer una colecta solidaria a través de Facebook y en cuestión de horas superó el monto total.

“El hombre tenía los ojos brillosos y una emoción muy grande, fue el mejor regalo del Día del Padre que le dimos. Con parte del dinero le compró útiles a su nena”, contó Xavier.