Este miércoles por la noche, los efectivos policiales se encontraban en la Comisaría de General Capdevilla, cuando escucharon gritos y observaron a los padres desesperados con su hijo ahogándose. 

Pasadas las 21, el personal que se encontraba de guardia intervino en esta situación y, tras practicarle las maniobras de Heimlich, pudieron salvarle la vida.

Rápidamente, ayudaron al menor de 8 años y lograron desobstruir sus vías respiratorias, quien tenía una tapita de plástico atorada.

Finalmente, el niño recibió asistencia médica en su localidad, donde continúa en buen estado de salud.