El gobernador Jorge Capitanich defendió eufóricamente su gestión y la inversión en Salud Pública durante el debate de candidatos a gobernador en el que expuso junto al diputado Leandro Zdero, candidato de Juntos por el Cambio, y el intendente de Resistencia: Gustavo Martínez, de la Corriente de Expresión Renovada.

Al momento de abordar cuestiones referidas a Salud, Capitanich aseveró que todos los hospitales cuentan con servicio de cirugía y calificó como “operaciones de prensa” las denuncias sobre la falta de insumos y profesionales que llevan a los médicos a improvisar férulas con cartón o botellas descartables. Y negó que algunos directores hayan renunciado por no contar con elementos indispensables para prestar el servicio y aguardar en vano una respuesta oficial a sus reclamos.

Mientras el Gobernador finalmente admitía la falta de 500 médicos, pero remarcaba la excelencia de la infraestructura, a través de las redes sociales trabajadores de Salud Pública de Charata y General Pinero exponian la realidad en esas ciudades del sudoeste chaqueño.

Para fundar sus dichos, publicaron una disposición de la Dirección de Región Sanitaria IV, Sudoeste II, en la que instruye el traslado de la máquina de anestesia del hospital Enrique V. de Llamas, de Charata, al hospital Isaac Waisman, de General Pinedo, en calidad de préstamo.

La decisión fue tomada en virtud de que el quirófano del hospital de Charata estaba inhabilitado por tiempo indeterminado, mientras el Waisman contaba con instalaciones mínimas para cirugías traumatológicas menores.

Sin embargo, esto último también fue desmentido por los trabajadores, que publicaron imágenes del supuesto quirófano del hospital de Pinedo que, por lo que se puede apreciar, ni siquiera cuenta con una camilla.

Las autoridades intentan poner en servicio un quirófano en General Pinedo desmantelando el de Charata que ya fue inhabilitado.